martes, 23 de abril de 2013

Una maceta original: Cintas en una piña

Con la llegada del buen tiempo, las terrazas y los patios estallan de flores. Andalucía se pone preciosa en esta época. No hay momento mejor para visitar la Alhambra y el Generalife, o darse una vuelta por Córdoba y comprender por qué sus Patios han sido declarados Patrimonio de la Humanidad.

Pero no todo el mundo tiene "mano" con las plantas. Hay terrazas que da gusto verlas y, justo al lado, otras que ¡dan una penitaaa!. Yo antes tenía muy buena mano con las plantas. Cuando digo antes me refiero a muuucho antes, cuando aún no tenía hijos, vaya, y podía dedicarle a mis macetas todo el tiempo que necesitaban, y limpiarlas, abonarlas, trasplantarlas, estar pendiente de las plagas y hablarles con cariño cuando estaban preciosas y con más cariño aún cuando estaban chuchurrías (de la RAE. Chuchurridas: marchitas, ajadas, esmirriadas, agostadas... hechas un asquito, vaya).

Luego, con dos bebés a la vez en la casa, las macetas pasaron inmediatamente no ya a segundo plano, sino a tercero o cuarto, porque como toda persona se entera a las 24 horas de ser padre, un bebé es como un agujero negro para tu tiempo. De golpe todas las horas del día se emplean en actividades que giran en torno al bebé, y si son dos, ya ni os cuento.
Los primeros que sufrieron la llegada de mis hijos fueron mis dos bonsais que no llegaron al primer cumpleaños, luego, poco a poco, el resto de las macetas fueron desapareciendo salvo aquellas especies muy resistentes que no necesitaran mucho cuido.

Al final, a modo de tribu de irreductibles galos entre las legiones romanas, quedaron un poto (Epipremnum aureum), una planta del dinero (Plectranthus verticillatus) y una cinta (Chlorophytum comosum) y de ellas tengo que reconocer que el poto no es el original. El pobre sufrió una poda tan drástica a manos de Luis David, que con dos añitos se metió a jardinero, que no pudo superarlo (más que nada porque le pilló fuera de temporada y aquí mi vástago dejó la maceta prácticamente en la tierra y las raíces).
En fin, que me quedan tres macetas y periódicamente me dan ideas de dejar de regarlas y cuando se mueran no volver a tener más plantas en casa, pero luego no puedo, porque me da mucha penita cuando empiezo a verlas mustias, así que ahí se conservan en recuerdo de épocas pasadas en las que la jardinería (en maceta) era uno de mis hobbies.

Éstos son los tres tipos de plantas, para que las reconozcáis, aunque conste que las fotos no son de las mías, que están un poco menos vistosas. Son sacadas de internet, que para eso está ;-)

poto (Epipremnum aureum)planta del dinero (Plectranthus verticillatus)


cinta (Chlorophytum comosum)


Esta entrada está dedicada a la cinta, que por su resistencia es una planta que vale tanto para exterior como para interior. No le gusta el sol directo porque le quema las hojas, ni tampoco la falta de luz, que en el caso de la Variegatum que es la que tiene la banda blanca en mitad de la hoja, puede incluso hacer que la pierda y se vuelva toda la hoja verde. Tolera bien los cambios de temperatura, aunque no las heladas. Si la temperatura es excesiva se le empezarán a secar las puntas de las hojas, lo que se corrige cortándolas (las puntas) y reubicando la maceta. En primavera y verano debe regarse con regularidad (2 o 3 veces a la semana en verano) aunque también tolera la falta de agua ya que la almacena en gruesas raíces, pero le gusta un poco de humedad, por lo que os agradecerá que pulvericéis agua sobre las hojas. En invierno tendrá suficiente con que se riegue una vez en semana.

¿Sabíais que la cinta también es conocida como Malamadre?
En la base de las hojas le crecen a la cinta estolones, que son brotes laterales, largos y delgados, en cuya punta surgen las pequeñas flores blancas y los hijuelos (pequeñas cintas con raicillas).

hijuelos de una cinta

Usualmente la propagación de las cintas se realiza enterrando en una macetita los hijuelos pero sin separarlos de la planta madre, hasta que enraízan. Entonces se corta el estolón y ya tenemos nuevas plantitas de cinta. Si no vas a plantar los hijuelos tienes que cortarlos de la planta para que se mantenga frondosa ya que si los dejas en la planta ésta dedica mucha savia a la alimentación de los hijuelos y acabará teniendo mal aspecto. Por eso se llama Malamadre, porque no sólo los hijos nacen bastante alejados de la planta madre sino que  es mucho más bonita y vistosa cuando se desprende de ellos.

Hoy os propongo una forma distinta de tener cintas en el interior de casa, con cultivo hidropónico. El "invento" lo ví en la farmacia de Los Baños (de Cortes y Graena) y me pareció superoriginal.

Solo necesitas una piña (también llamada cono) seca de pino, un cacharro con agua, una cinta con hijuelos y un vaso bonito.


piña (cono) seca de pino hijuelos de una cinta


Encajas la piña en un cacharro con agua, para que media piña, más o menos, quede sumergida, e insertas los hijuelos entre las escamas. Al día siguiente verás que las escamas de la piña que secas estaban más abiertas, al mojarse se han cerrado, aprisionando las raíces de los hijuelos. Entonces traspasa la piña al vaso en el que vayas a dejarla y verás como los hijuelos toman a través de la piña los nutrientes del agua.

Una maceta original: Cintas en una piña

Como curiosidad, porque no todo el mundo está enterado de esto, os diré que normalmente la recogida de piñas es una actividad que sólo está permitida entre el 1 de noviembre y el 15 de mayo y dado que pinares o parques son de titularidad municipal, se debe solicitar un permiso al ayuntamiento propietario. Aunque en algunos ayuntamientos requieren que tengas carnet de recolector, no suelen denegar el permiso, pero fuera del plazo citado o sin contar con permiso municipal es una actividad no permitida en España.
Supuestamente si vais al monte y recogéis una o dos piñas no vais a tener un agente forestal o un municipal escondido tras del segundo abeto a la izquierda, libreta de multas en ristre, pero poder pasar, puede, y si no, leeros esta noticia:
Condenados por recoger piñas en un parque de Zamora
Y es que, aunque parezca surrealista, como dicen en la siguiente, por haber hay hasta contrabando de piñones :-)
Mercado negro de piñas
Lo nuestro no será para tanto :-)
♥ ♥ ♥

3 comentarios :

  1. felicidades q hermosas plantas pero como se llama la que esta en el vaso esta hermosa.

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  2. La del vaso se llama "piña metida en un vaso, con hijuelos de cinta atrapados entre las escamas". Es lo que ha estado explicando el artículo......

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  3. Just el que buscava! Gràcies!!

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